El Perú es un país asquerosamente maravilloso. Porque en nuestro país podemos encontrar cosas nunca antes vistas. En el Perú la realidad se confunde con la fantasía. Estamos llenos de tongos, Magaly’s, Susy’s Diaz, Melcochas, “chatos” Barrazas, de jugadores de “jutbol” borrachos, de políticos oportunistas, comieros, cutreros y la mejor parte o show de todo el circo es cuando nos muestran por la televisión una jaula de madera llena de “congresistas”, pero lo mejor de todo es que los tenemos variaditos. Por ejemplo el come pollo, la roba luz, lo que se juerguearon en Brasil, los del avión presidencial, el mata perro, nacionalistas que les gusta hacer huelga, aquellos que contratan gente que no existe, uno al que su esposa le mete cuchillo, uno que se cree fotógrafo y cómo olvidar (díganmelo por favor) a esos que les gusta que le laven los pies o les planchen unas cuantas camisas y polos. El Perú esta lleno de rarezas y de puras injusticias dicen por ahí, pero cuando el poder judicial quiere demostrar que todo eso son puras patrañas y desean aplicar la ley a un extranjero de debió estar fuera del país hace mucho por narco toda la prensa y ese mundillo al que llamamos “prensa de espectáculos” se pone a favor de él diciendo que se comete una injusticia cuando se cumple la ley. Y luego se quejan de que las leyes no se cumplen en nuestro país.
Y en momentos como estos recuerdo cuando nuestro respetadísimo y gloriosos y no me menos agraciados congresistas premiaban en televisión y mostrando al Perú entero que el congreso solo sirve para llevar a gente que no tiene nada que hacer ahí y darle cualquier condecoración sin motivo algunos, por ejemplo: llevaron a Magaly cuando esta salio de la cárcel o sea a una ex reclusa, luego apareció una tal Olga Tañon, y como no olvidar al maestro Chespirito, se nota que cuando un congresista quiere una foto o un autógrafo puedo hacer lo que quiera para logarlo no creen. En cambio, ahora todos se sienten tan peruanos como nunca, ahora todos se suben al coche de la popularidad al hablar de un gran peruano y de una persona que dio su vida y su arte a nosotros los peruanos. Ahora todos lamentan que ya no este, ahora todos lloran sobre las lagrimas de otros, todos aquellos que lloraban cuando murió un tal “rey del pop” o aquellas que se sacaban la prenda cuando venían un grupito de hermanos gringos a cantar sus 4 canciones. Nuestro querido “zambo” se nos fue, ahora solo nos queda recordar su talento y escuchar o ver en videos cómo su voz gruesa y potente se desquebrajaba al cantar su famoso “contigo Perú”, él no tenia complejos, él se sentía orgulloso de ser como era, se sentía orgulloso de la tierra en donde nació, se sentía orgulloso de ser peruano. No se trata de nacionalismo estupido ni de aparentar cosas que no pienso, solo se trata de darnos cuenta que el Perú puede tener todas las cosas negativas y poco favorables para nuestro desarrollo, sino se trata de dar a entender que podemos sentirnos orgullosos de lo que somos y de lo que tenemos.
Se trata de brindarle lo mejor a nuestro Perú y si con una canción basta que así sea. Cómo poder olvidar el canto del “zambo” acompañado de la mejor guitarra peruana, Oscar Avilés, un amigo que nos enseño que una guitarra también puede llorar y mostrarnos su lado más sensible y movernos así un poco. Algunos dirán que la música es buena o mala, pero la música es solo eso música ya sea cumbia, reggaeton, tecno, pop, rock punk y todos lo estilos que aparecen últimamente, las música es buena cuando en realidad nos pone de buen humor y nos alegra un poco la puta vida. Pero la música que nos dejo el querido “zambo” ahora se recordara más que nunca, esperemos que los programetes de le tele se llenen de videos y reseñas de vida, solo esperemos que esta vez sí nos demos cuenta de que no solo hay peruano que dañan nuestra imagen sino también existen aquellos que dan su arte y cómo no decir su vida por nuestro país. Yo me pregunto por qué no les ponemos a escuchar a esos muchachitos de la selección algunas de las canciones de Arturo el “zambo” Cavero haber si así se dan cuenta que hay gente que sí quiere a su país y al menos se les sube un poco el animo y defienden como lo haría cualquier otro que esta atrás de la pantalla esa camiseta que a todos ellos le queda en talla XL y como diría él: nuestra raza es peruana. Dicen por ahí que "dios" es peruano y ahora yo le creo, porque nos dió a un "zambo" que nos enseño más de lo que imaginamos. Y que en paz descanse por fin nuestro icono nacional.
VIvela como el zambo. A nuestro país.
